Campeche. La reforma al Poder Judicial se aprobó en Campeche con los mismos elementos con que se aprobó a nivel nacional: En medio de protestas sociales, con sedes legislativas rodeados de vallas metálicas y fuertemente custodiadas, y a través de la traición al pueblo y a sus partidos políticos de algunos personajes. La leyenda con letras metálicas que ha distinguido al recinto legislativo de Campeche: “Vox Legis, Vox Populi”, nunca había sido tan pervertido.
Esta vez, la vox legis no fue la vox populi, porque ésta se encontraba del otro lado de las vallas, exigiendo un alto a la reforma judicial.
Desde la tarde, cuando se dio a conocer que el Congreso del Estado celebraría una sesión extraordinaria para aprobar, a toda prisa y vía fast-track, la reforma que no tenía ni 24 horas de haber sido enviada por el Senado de la República, llegaron patrullas y policías cargando vallas y todo tipo de artilugios y equipos para hacer frente a los manifestantes que ya se esperaban.